Como puedes detectar si sufres bulimia nerviosa
Si
- Hay momentos en los que necesitas comer una gran cantidad de comida.
- Sientes que no tienes control sobre lo que comes en esos momentos.
- Te sientes culpable o avergonzado/a por lo que te sucede.
- Te preocupan las consecuencias que pueden tener en tu salud y tu imagen.
- Llevas a cabo estrategias para evitar ganar peso después de estos atracones, como vomitar, restringir tu alimentación, hacer mucho ejercicio físico o utilizar laxantes.
- Este problema está afectando a tus relaciones sociales, familiares y a tu autoestima.
- Te sientes preocupado/a por tu peso y no puedes controlar esa necesidad de comer.
Es posible que estés sufriendo bulimia nerviosa. Los profesionales de Intro Psicólogos podemos ayudarte a encontrarte mejor, ofreciéndote apoyo para que puedas lograr sentirte bien con tu alimentación.
¿Qué es la bulimia nerviosa?
La bulimia nerviosa es uno de los problemas psicológicos que se manifiesta en relación a la alimentación. En ella se dan dos fases más o menos diferenciadas: una primera fase en la que la persona siente una necesidad muy intensa, que escapa a su control voluntario, de ingerir comida, seguida de una segunda fase en la que aparecen sentimientos como vergüenza, culpa, angustia, que suelen provocar actos compensatorios de esa ingesta, como vomitar de forma intencionada, consumir laxantes y diuréticos o hacer excesivo ejercicio físico con el fin de aliviar esas emociones de malestar con el acto de ingesta y con el propio cuerpo. Denominamos a la primera fase atracón y a la segunda purga.
La bulimia nerviosa afecta a la salud de la persona que la sufre a diversos niveles:
- Salud física: la acidez de los vómitos pueden provocar daños en el esófago y problemas dentales, los comportamientos de purga continuados producen deshidratación y desnutrición, así como alteraciones del ritmo cardíaco relacionadas con la disminución de los niveles de potasio.
- Salud psicológica y emocional: cada persona puede tener unas vivencias particulares y únicas de su conflicto psicológico. En muchos de casos, suelen sufrir emociones intensas de miedo, culpa, tristeza e irritabilidad, así como problemas de autoestima.
- Salud social: como ocurre con otros problemas de alimentación, la bulimia nerviosa es una dificultad que muchas personas viven en secreto, guardando silencio sobre cómo se sienten por temor a ser juzgadas, castigadas o incomprendidas. Este temor, unido al daño emocional que se siente, va favoreciendo un aislamiento progresivo del entorno que deteriora las relaciones íntimas con los otros.
Cómo entendemos la bulimia nerviosa
Cada persona puede desarrollar síntomas de bulimia nerviosa desde experiencias y vivencias diferentes, por eso tenemos que llegar a comprenderlos analizando cada caso de manera individual.
Si reflexionamos sobre el significado que tiene la ingesta incontrolada de comida, para algunas personas es un modo de darse algo a sí mismas, un intento de llenar un vacío, tratar de conseguir regularse a nivel emocional con la estrategia que han podido desarrollar hasta ese momento, en este caso, comer. Es necesario que exploremos cómo ha sido y es la relación de la persona con la comida, qué simboliza para ella a nivel profundo el acto de comer.
También puede suceder que hayan encontrado en la comida una fuente de alivio de sensaciones dolorosas, como ansiedad, tristeza, conflictos personales u otras angustias que provocan malestar.
Por otro lado, las conductas compensatorias también están cargadas de un simbolismo que es particular para cada persona, representan una idea de sí misma y de lo que merece o no recibir. La dificultad para controlar lo que se come genera una herida en la autoestima que aumenta la angustia, influyendo de forma negativa en el problema. Comprender de forma profunda qué conflicto está expresando la bulimia nerviosa permite darle un sentido a lo que sucede, atender a la necesidad que está cubriendo este síntoma y comenzar a desarrollar nuevas herramientas que resulten más satisfactorias.
Cómo tratamos la bulimia nerviosa
En las sesiones de psicoterapia vamos desarrollando con la persona las dificultades conscientes o inconscientes que le llevan a relacionarse con la comida de la forma en que lo hace. Para dar un sentido a lo que le sucede, es necesario conocer cómo ha sido la construcción de su identidad y cómo ha aprendido a regular sus emociones.
Acompañada por un psicólogo que pueda contener las angustias, temores y preocupaciones, aportando una mirada libre de juicio, la persona va pudiendo explicarse lo que le sucede y adquiriendo herramientas que le permitan sentirse mejor.